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El INTCF presenta el primer estudio de epidemiología y toxicología de las muertes por suicidio en España

21/12/2021
Presentación Estudio Epidemiología y Toxicología de las muertes por suicidio

Tiene como objetivo ofrecer datos epidemiológicos sobre los suicidios en nuestro país y sobre los métodos o mecanismos de suicidio que puedan ayudar en el desarrollo de políticas de prevención.

En 2019, hubo en España 3.671 fallecimientos por suicidio, según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), una cifra tres veces superior a la anual de fallecidos en accidentes de tráfico.

Casi tres cuartas partes de los suicidios recibidos en el INTCF corresponden a hombres (73,1%), frente al 26,9% mujeres. Por edad, la mayor incidencia se encontró en personas de entre 40-49 años (20,8%) y 50-59 (22,2%).

El estudio toxicológico pormenorizado de las víctimas de suicidio ha puesto de relieve la alta prevalencia del poli-consumo de psicofármacos en este tipo de muertes.

El Instituto Nacional de Toxicología y Ciencias Forenses (INTCF) ha presentado hoy el estudio Epidemiología y Toxicología de las Muertes por Suicidio en España. Se trata del primer informe de estas características en España, que tiene como objetivo ofrecer datos epidemiológicos sobre los suicidios en nuestro país y sobre los métodos o mecanismos de suicidio con una especial referencia a los hallazgos toxicológicos en este tipo de muertes, que puedan ayudar en el desarrollo de políticas de prevención.

Con este informe se pretende, además, atraer la atención multidisciplinar de los profesionales y de la población en general sobre la problemática del suicidio, que sigue siendo la primera causa de muerte violenta en España, según ha explicado Antonio Alonso, director del INTCF.

En 2019, hubo en España 3.671 fallecimientos por suicidio, según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), una cifra tres veces superior a la anual de fallecidos en accidentes de tráfico. Las muertes por suicidio representan el 37,2% de las muertes violentas en la casuística del INTCF del año 2019.

Por sexo y edad

El estudio presenta los resultados de 1.822 casos de muerte por suicidio en España analizados por el INTCF durante 2019. Casi tres cuartas partes de los suicidios recibidos en el INTCF corresponden a hombres (73,1%), frente al 26,9% mujeres.

Por edad, la mayor incidencia se encontró en personas de entre 40-49 años (20,8%) y 50-59 (22,2%).

En cuanto a los mecanismos de suicidio empleado, el más frecuente fue la ahorcadura (40,9%), seguido de las intoxicaciones (22,4%) y la precipitación (18,7%). La mayoría de los hombres se suicidaron mediante ahorcadura (46,4%) seguido de la intoxicación (18,7%) y precipitación (16,2%), mientras que en las mujeres los mayores porcentajes se observaron en los suicidios por intoxicación (32,7%) seguido por los casos de precipitación (26,3%) y de ahorcadura (25,95%).

También es encontraron diferencia en los mecanismos empleados mayoritariamente en los suicidios por Comunidades Autónomas (CCAA), concretamente en Galicia, Castila-La Mancha y Andalucía en las que se observó, respecto a las otras CCAA, un incremento de los casos de ahorcadura y una disminución en las intoxicaciones y precipitaciones.

Los datos obtenidos con la casuística del INTCF fueron semejantes a las reportados por el INE y por la Organización Mundial de Salud (OMS) para los países de ingresos altos, pero difirieron de los datos globales de la OMS, especialmente en los rangos de edad de los suicidas.

Análisis toxicológicos

En los análisis toxicológicos realizados en las muestras recibidas en el INTCF se obtuvieron resultados positivos en el 77,8% de los casos de suicidio; mientras que en un 22,2% no se detectó ninguna sustancia de interés toxicológico. El número de positivos fue mayor en las mujeres que en los hombres.

Los estudios toxicológicos pusieron de manifiesto que casi la mitad de los casos positivos habían consumido benzodiacepina (47,8%), seguido por los antidepresivos (40,2%).

La mayoría de los casos de suicidio estaban relacionados con poli-intoxicaciones por el consumo simultáneo no sólo de compuestos de varios grupos, sino también de varios medicamentos del mismo grupo y, por tanto, con la misma actividad farmacológica.

La vigilancia y la restricción del acceso a los métodos de suicidio resultan ser elementos claves en su prevención, según se ha destacado en esta jornada. Para desarrollar políticas eficaces de restricción de acceso a los métodos de suicidio se requieren datos científicos de calidad basados en estudios poblacionales suficientemente representativos. Precisamente, este es uno de los objetivos fundamentales de este informe del INTCF.

La directora del Centro de Estudio Jurídicos, Abigail Fernández, ha destacado la importancia de la colaboración entre instituciones y organismos, así como de la formación, para impulsar la divulgación y prevención de un tema tan delicado como es el suicidio.

En el acto, presentado por la Abigail Fernández, la exposición de los principales datos del estudio ha corrido a cargo de la exjefa del Servicio de Química del Departamento de Sevilla del Instituto Nacional de Toxicología y Ciencias Forenses, Carmen Jurado. A continuación, se ha celebrado una mesa redonda de discusión, moderada por Antonio Alonso y en la que han participado Rafael Bañón, médico forense asesor de la Dirección General para el Servicio Público de Justicia, del Ministerio de Justicia; Begoña Brimes, directora del Observatorio Español de las Drogas y las Adicciones del Plan Nacional Sobre Drogas, del Ministerio de Sanidad; y Andoni Anseán, presidente de la Fundación Española para la Prevención del Suicidio.